lunes, 20 de diciembre de 2010

HASTA QUE DESPIERTES



Nunca devolverás mis voces,
las palabras que quedaron congeladas
entre tus labios y los míos.

Tu amor brota del miedo, no de otra clase de sentimientos.
Mejor  no digas nada,
luego el lamento  se arraiga
y las sombras ausentes crecen y crecen.

La niebla entra en nuestros sueños.
No temas, mi abrazo no se deshará
aunque se diluya la necesidad de sobrevivir
en las ondas de otros cuerpos. 

El azar vive en una calle atravesada,
pero yo seguiré a tu lado
como una parte visible de la nada.
Visitaré tus párpados con mis besos
y hasta que despiertes
 seré tu mago
 en los mares de la madrugada.


martes, 14 de diciembre de 2010

MEMINISSE


Volvió
a mis labios
una noche de abismo negro,
desnuda en la espesura
de un viento inacabado.
Sentía en sus manos
relámpagos de frío
atados a las sombras
de paisajes desconocidos
y  el peso susurrante
de un oculto vacío.

No tenía
nada que rodear.
Mi pecho abría compuertas
sólo para alimentar espectros
con deseos parasitados.
Pero ella volvió, con el perdón desenvuelto
en sus manos ligeras,
como un regalo amurallado con lo efímero.

Volvió
a mis labios
sin importarle cuánto mis entrañas
se habían teñido de oscuro.
Con la mar de fondo
prendida de sus ojos
mecía nuestro viejo barco de amor
en su cintura.

 

jueves, 2 de diciembre de 2010

DELIRIUM


No mezcles
tu grito en llamas,
desvalido como un oleaje
que ya no puedo abrazar.
Reverso en lo más leve
del vacío reconciliado boca abajo,
asciendo en la oscuridad
con el sabor de un tacto antiguo.

Son
los dominios que me despiertan
respirando más aprisa,
sueños incitadores de la lejanía rasgadora
que una vez fuera
el alma.

Vuelve a abrirse
el giro que me inicia
en el corredor de una memoria anonadada
que hierve sin tu voz.
Y puede
que las columnas irreversibles donde vivo
sean solo entradas tenebrosas
sin más paradas que precipicios de piel
bajo las manos.