La habitación tiene la luz de la arena
Pero la noche se abre paso como sangre negra
Y la oscuridad toma la forma de mis sentimientos
El silencio nunca llegó a cerrarse del todo
Se quedó allí como un pájaro con el ala rota
Pero no quiero volver a decir que la amo
Las palabras estropean
Son mariposas crecidas en un sueño extraño
Hay algo de polvo que no pertenece a nadie
En los ángulos que la recuerdan
Puede que solo sea tristeza
El deseo es un cuchillo que abre la oscuridad
Ha sido invocado y trae la fuerza desesperada
De un cuerpo que viene a acostarse en mi tiniebla
Pupilas que brillan como hielo flotando en el mar
Una boca voluptuosa que cae en desnivel
Hacia mis labios
Ha vuelto
Desde el invierno
Su calor se extiende
Y ya no puedo detenerlo
Y es que cuando el fuego se hospeda en el corazón, se apodera de la piel… uno cae rendido cual ofrenda, y no… ya no puede escapar, ni detenerlo…
ResponderEliminarPrecioso, querido amigo, una hermosa conjunción, letras, imagen, y música…
Bsoss enormes.
Las pupilas de tu letras brillan y laten con las emociones de tu inmenso sentir.
ResponderEliminarSiempre llegas y acaricias, intimista, un placer leerte.
Besos.
No sé porqué, pero ese silencio parece ser que no se cierra nunca del todo, un pájaro con una ala rota.
ResponderEliminarPrecioso el poema, es diferente, lleva tu sello y es un gusto leer tus letrras.
Un abrazo de buena noche.
Bss, Inti.
Algunos recuerdos vienen con filo y un silencio atronador.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Mil besitos, amigo mío.
Muy bueno Me encanta tu rima
ResponderEliminargracias por tu intensidad de hombre con la letras
EliminarUNA ATMÓSFERA DONDE HAY OPUESTOS DELIBERANDO EL AMOR.
ResponderEliminarABRAZOS